Crónicas camineras cap5

Desde luego lo bueno que tiene el camino es que ves de todo, desde lo mejor, como un grupo de conocidos en el camino de nacionalidades distintas, que conversaban alegremente mientras comianX  a lo peor, el típico y rancio grupo de nacionalistas catalanes, que no devuelven el saludo, montan barullo en la misma habitación en la cual se encontraban personas durmiendo comportándose  cómo críos de 16 años cuando el más joven tenia cerca de los 40......en fin dios nos hizo a imagen y semejanza con un trozo de barro, pero con gente así creo que se confundió y cogió otra cosa de color marrón.
Pero para que malgastar más palabras....el caso es que pase una tarde encerrado en el albergue debido a las continuas tormentas y la verdad es que no fue tan mal, nuevamente el camino sorprende y coincido con Alberto, un chico de pamplona que marcha en bici a Santiago, comenzamos a hablar y resulta que es de burlada de toda la vida y a pesar de sus continuas negaciones, es un hacha de la bici, compite en top30 y acabó  en las bardenas el décimo de su categoría, si eso no es ser un hacha que venga Dios y lo vea.
Resulta ser una compañía inmejorable, me pasa los perfiles de las etapas y nos deseamos buen camino.
Hoy Me despierto antes de tiempo debido al dolor de las ampollas, parecen que durante la noche y el calor se han expandido, aprovecho el momento en el que una chica koreana que también se está preparando para pedirle una aguja, me pincho las ampollas y una de ellas estaba tan hinchada que al sacar la aguja ha lanzado un chorro de líquido........Dios que alivio!!!
Son las 5:15 cuando comienzo a caminar, me sorprende ver que casi no hay señales del camino y me cuesta horrores orientarme, Joder ya estamos con las señales-pienso. Por fin me oriento entre los distintos quiebros y no tardó en llegar a grañón momento en el que la naturaleza me llama, veo dos peregrinos que salen de un albergue y sin dudarlo entro......un salto en el tiempo en toda regla, todo esta pintado de colores chillones y pinturas hippies, miro el cartel y se llama la casa de la alegría y tanto que lo era..... porque me quede bien alegre después de soltar lastre.
Salgo de bustok versión míni me doy de bruces con la joven coreana....coño pues si que anda la chica!!!! Me dice que menos mal que me ve, que estaba muy asustada, se había perdido y se guiaba por la luz lejana de mi frontal, recupera la calma y le doy mi número para que me llame si tiene problemas durante el trayecto, parece que le da más calma aun y prosigo mi camino.
La gente dice que la parte casteñana es lo más feo y no lo entiendo,  los paisajes son espectaculares, es una bendición girar 360 grados y ver campo, me cruzo en mi camino con un señor de 75 años que es de parís, una señora de 69 años polaca.....eso sí que es tener valor.
Por fin llego a belorado, la entrada es horrible, pero enseguida se transforma y las casas abandonadas y suelo terrero da paso a casas de ladrillo mazizo y suelo gris bien uniforme, todo muy limpio.
Me tomo un café y continuo el viaje, nuevamente me encuentro en el campo pero en esta ocasión el piso no es terrero de piedras si no que han recubierto el camino con tierra dorada y pienso....este es el camino que lleva a Oz?.....en fin, desvarío del que lleva 30 km. Me cruzo con un grupo de chavales que están de colonias y hablo con el monitor que me pregunta de mi propósito,  le cuento mis motivos y acordamos en dar una charlita a los críos,. Sin casi darme cuenta llego al destino de hoy, estoy alojado en un precioso albergue y he entablado conversación con una mujer de Vitoria, en fin ahora descansar, ver el pueblo y comprar agujas... que me duelen las ampollas.
Mañana será otro día.