Crónicas camineras cap8

Menuda jornada me espera - pienso mientras leo los posibles puntos finales de la jornada siguiente. Me encuentro en Itero de la vega, en un albergue que deja que desear, las camas parecen que se van a caer de un momento a otro y la barandilla se cae a trozos literales pues me quedo con un trozo en la mano y por poco me caigo. La cena viendo la salubridad de la cocina consiste en arroz a la cubana y pechugas a la plancha aderezadas con una fina capa de grasa negra. Me siento a cenar con un grupo de personas mayores, creo que toda la juventud ha optado por no entrar en la casa de los horrores,  el grupo lo componemos,  tres italianos, tres franceses,  dos noruegos y yo, parece un chiste.....optamos por hablar en inglés y claro cada uno con su pronunciación peculiar, pero a pesar de toda barrera idiomatica, todos estamos deacuerdo que el albergue es una mierda y la cocina más aún. Tras cenar nos deseamos buen camino y nos vamos a la cama, me deslizo dentro del saco deseando que no me coma alguna cucaracha o algo parecido.
Entre vuelta y vuelta suena el despertador, son las cuatro y media de la madrugada, desayuno solo zumo puesto que el batido que compré estaba caducado en más de un mes, saco los bastones y decido caminar para calentar, ya tendré tiempo para correr en los 66 km de jornada, la noche me envuelve, fresca, pura y llena de estrellas,  hecho de menos la luna, los grandes campos son regados y algunos aspersores tienen mal graduado su radio de chorro y riegan el camino, lo que provoca que tenga que ir parandome para lo acabar mojado.
La fina línea del alba aparece y se comienza a perfilar el horizonte, es hora de guardar los bastones, aprovecho para entrar a desayunar,  pido un desayuno, café, tostada y zumo 3 euros, me parece siento y saco el monedero y para mi sorpresa solo tengo 2,60 euros, se lo digo al camarero y le comento que cuanto debo de comprar para hacer el pago con tarjeta,  el tipo muy indignado me dice que esas cosas se avisan antes,  que qué iba hacer el con la tostada,  me disculpo nuevamente y le digo que sólo me faltan 40 céntimos y el no se baja de la burra y vuelve a recriminarme mi falta de efectivo......Me muerdo la lengua para no responderle que existen los tarjeteros electrónicos hace tiempo y que un hotel tal cómodo denomina el en su letrero debería de disponer de ese avance informático, pero no me quiero mostrar antipático y le digo que es lo que puedo tomar por ese dinero.......el café - dice secamente...... Jodete y baila Manuel, que viva la solidaridad jacobea,  este tipo es todo un  ejemplo a seguir, espero no torcerme un tobillo......este me cobra hasta por llamar por mi móvil- apuro el café y salgo a la mañana clara y fresca.
Los primeros kilómetros se me hacen duros, me cuesta correr por el dolor en la tibia derecha, la miro y veo que esta inflamada.....a tomar por culo......saco de mi bolsillo dos ibuprofenos y me los tomo, que más da que un par de horas antes me hubiera tomado otros dos.
Alcanzó fromista sin mucha dificultad y aprovecho para sacar dinero y no tener un encontronazo como el sufrido con el buen samaritano,  relleno los botes y me quito la chaqueta, el camino se torna monótono por momentos hago una rotonda y entro en la senda de los peregrinos. Aquí todo es recta y sube y baja y más recta, tras dos horas paro en un albergue que tienen burros sueltos y me rio un rato con ellos,  en especial con uno que entraba la cabeza y tiraba con suavidad la tapa del cubo de basura lo que provocaba que el hospitalero saliese en su busca y el cabron Se alejaba corriendo como nunca he visto correr a un burro, pero al momento volvía ha hacer lo mismo.......Jejejeje que joputa tu.
Por fin llego a carrion de los condes, el pueblo es espectacular, típico castellano,  de construcción baja y tejas marrones claras. Estoy de suerte puesto que hay mercado de frutas, compro tres peras y un cuarto de las mejores cerezas que he visto nunca, pregunto en una tienda donde hay una fuente, me responde que al final del pueblo junto al camino,  enfrente del monasterio hay una. Extrañamente me comienzan a doler las ampollas de los pies......pues aun me quedan 41 km.......
Tras comerme la fruta y rellenar los bidones retomó el camino, tengo 18 km de recta sin árboles ni fuente alguna, la zona es conocida por su dureza y vaya si lo es, he de sumarle el hecho de ser la 1 del mediodía y sin rastro alguno de nube.......Me cagon la puta......18 km que sólo se acaban tras aparecer el pueblo en una vaguada,  llego a calcedilla y meto la cabeza en un chorro de agua de la fuente bajo la mirada atenta de una peregrina húngara,me siento en el banco del parque junto a la fuente y la mujer me dice que desde donde vengo, le digo de itaro de la vega, ella se muestra asombrada y me pregunta por mi destino final, al responder que a Sahagún,  rompe a reír y me dice que imposible que son muchos, entre risas me pregunta cuantos kilómetros son y al responder que 64 nuevamente rompe a reír.......no puedes correr más que en una maratón chico......lo dirás tu con tus 200 kilos jodida.....la dejo allí sentada mientras repetía sixty-four kilometres entre risas.
Nuevamente me encuentro corriendo por el camino, claro, polvoriento, de piedras sueltas que se hunde en los campos interminables palentinos.
El calor me empieza a pasar factura, son las tres de la tarde al paso de ledigos y los pies me duelen terriblemente, cada pisar en piedra suelta es un navajazo en los pies, -hay algo no va bien-  pero no pienso parar a verlo, la tibia hace que tenga que cambiar la amplitud de zancada, corro ligero pero sin apenas avance....... -Dios como me duele- no se si llegare, pero entre juramento y juramento alcanzo un albergue a 4 km de Sahagún......... Ya está bien por hoy, miro el gps 62 km en 12 horas.
La bienvenida me la da un hombre que al ver el sello de itaro me dice que la bici la tengo que dejar atrás.....bici???? Si vengo corriendo, - eres deportista o militar porque si no no podrías soportarlo- me dice el tio......Jode que ojo tiene pienso, me acomodo en la habitación, es acogedora,  tranquila, de paredes de adobe y techado de madera con vigas de madera barnizadas en tono oscuro.
Salgo al jardín para estirar, me siento algo mareado, el cansancio y el calor pasan su factura y voy lo más rápido posible al baño. Tras pasarme los sudores pido una coca-cola para asentar el estomago y regreso al jardín. Porfin me miró los pies, no puede ser.......las ampollas están rodeadas de un líquido más amarillento, deben de ser durezas pero tras pinchar descubro que los hilos que me servían de purgas de la ampollas se han infectado y todo es pus. Normal que me dolieran como condenadas, me paso un buen rato vaciando los pies de líquido purulento.
Conozco a Santiago, un hombre de 42 años residente en carabanchel, comenzamos a hablar y pronto compenetrados,  es padre de dos niñas que quiere traer al camino. Junto a nosotros hay dos chicos coreanos con los que también conversamos,  son del centro de Corea,  uno tiene nombre raro tipo suy-yao y el otro para sorpresa mía se llama phill. 
Cenamos los cuatro en la misma mesa y nos lo pasamos bien, como todo, la conversación gira en torno al camino. Tras la cena, nos deseamos buen camino, me meto en la cama con la esperanza de no tener el dolor a la mañana siguiente, pero nada más sonar el despertador soy consciente de que estoy roto.....
Desayuno en compañía de Santiago el cual se muestra preocupado por mi situación- eso lo tienes hinchado, tío- le comento que a ver que tal, que me probaré. Nuevamente nos despedimos,  comienzo a caminar y la cosa no pinta nada bien, espero que caliente me digo,  quizás si hecho ha correr se me pasa......comienzo a correr, bueno la cosa va que no es poco, me digo nuevamente, por fin veo sahagun y ya estoy en tierras leonesas. Ufffff me duele bastante bajando y es increíble lo que es la persona.....en el momento de transición de bajada a subida....CHASS!!!! Suena dentro de mi pierna, doy dos giros botando sobre una pierna y gesticulo con los brazos en señal de dolor, de repente no existe más dolor en los pies, más fatiga, dolor de cabeza, todo se esfuma y dentro de mi comienza el proceso mental que todo el mundo teme......hasta aquí hemos llegado,  sintiendo que podría pasar y pasó,  no puedo más, me apoyo en un mogote de señalizacion y comienzo a llorar, me siento abatido. Siento tristeza por no ver cumplidos todo los pensamientos e ilusiones.
En fin es el camino, camino que he corrido.... he disfrutado y he sufrido, camino en el que he conocido a muchas personas, camino que nos junta y nos separa y sabiendo que nuestro compartir es efímero, nos abrimos a los demás dando lo mejor de nosotros.
Una lesión es pasajera pero el camino es eterno.......nos volveremos a ver........nos veremos en el camino.